dijo la cabra:

saber mirar es como hacer fotos sin cámara,"mírame"

viernes, 22 de julio de 2011

El dulce y la sandía(cuento de verano)

Hace  muchos,muchos años,en el verano de 1977 en concreto,un dulce, después de mucho pensarlo,le mandó un mensaje en lengua dulciana a una sandía que le traía de cabeza.El dulce estaba en una confitería que daba al Mar Mediterráneo y desde allí podía ver a la sandía como se refrescaba en la orilla de la playa,arropada por una familia escandalosa(por lo numerosa que era)pero humilde.
Al percibir el mensaje en su interior mas dulce, enrojeció un poco mas de lo que estaba por dentro y se fue dejando llevar por las olas y por la misma orilla para ponerse justo en frente de la confitería,para hacerle saber al bollo con nata(el dulce) que le había encantado su poesía y también para verlo mas de cerca y mejor.
Entonces una niña de una familia de al lado  a la que pertenecía la sandía,empezó a zarandearla y gritando a su madre que ella quería sandía,el bollo mientras se puso muy nervioso,pero la sandía ya había pensado un plan infalible para poderse encontrar con su amado bollo.
La sandía sabía perfectamente que vendría el niño de su familia para rescatarla en breve, por lo que se dejó escurrir por las manos de la niña para caer a la arena y resquebrajarse un poco.
Efectivamente el niño llegó de inmediato y le recriminó a la niña que había roto su sandía y así es como provocó la sandía el primer encuentro del niño y la niña,que mas tarde le serviría de nexo para encontrarse con el bollo con nata.
Al mismo tiempo que el niño estaba recriminando a la niña, la sandía empezó a desprenderse de una pequeña parte de la esencia del mensaje que el dulce le había mandado para embaucar a la niña en el capricho de un bollo con nata.
El niño cogió su sandía y la llevó a su sitio y al llegar el padre le dijo que tenía que ser mas educado.
Por otra parte la niña empezó a darle el follón a su madre de que quería un bollo con nata por lo que el dulce observándolo todo, empezó a entender el plan de su amada sandía,la madre por no oír mas a la niña le pidió dinero a su marido Antonio que estaba leyendo el periódico para ir a la confitería a comprarle el ansiado bollo con nata a la niña.Pero había un problema: habían dos bollos con nata y otra familia estaba comprando en la confitería.Y esta niña tendría que llevarle a él y no al otro bollo con el que se llevaba fatal porque se creía mas dulce y guapo que él.


Al entrar en la confitería  empezó a gritar y repetir la niña"bollo con nata,bollo con nata,bollo con nata,bollo con nata"...por lo que la familia que estaba comprando le dio el capricho,(a la abuela en concreto),le dijo a su hija Caruchi que ella quería un bollo con nata por lo que se acercó a verlos y con el dedo le dijo al confitero que quería a nuestro querido dulce,a éste le entro el pánico solo de pensar que no vería mas a su amada sandía pero por suerte cuando se puso tan nervioso,su nata se puso un poco amarillenta por lo que su hija Caruchi le aconsejó que se llevara el otro.El otro bollo al cogerlo el confitero se marchó riéndose y diciendo:"has visto como eres muy feo y soso".Nuestro bollo calló muerto de alegría y recuperó su color blanco de su nata.
La niña llego de nuevo a la playa con el bollo muy contenta, dándole pequeños bocaditos,mientras el niño se estaba comiendo el corazón de la sandía que le había dado el padre...entonces el plan de la sandía y el bollo empezó a funcionar...la sandía empezó a mandarle aromas a la niña y el bollo al niño,por lo que cada uno quería lo del otro...y al mismo tiempo a los niños les estaba dando un cosquilleo de amor en sus barriguitas porque ya habían ingerido parte de sus postres.
El niño se fue acercando a la niña un poco empujado por el padre por lo mal educado que había sido antes e invitándole a que le diera un trozo de sandía a la niña.Llego hasta ella ofreciéndole un trozo que aceptó,y a la vez la madre animo a la niña que compartiera su bollo,así fue como se encontraron y se amaron nuestro dulce y nuestra sandía en dos estomaguitos de niños que a su vez aprendieron también a amar.
Y ahora viene lo mejor:y colorín colorado este cuento se ha acabado.

martes, 5 de julio de 2011

la megafonía y las pelis porno en super-ocho(anécdotas)

Eran aquellos tiempos de pisos de estudiantes,concretamente el primer año,dónde un grupo de compañeros y amigos nos disponíamos a compartir piso, experiencias y travesuras.Travesuras estas que para la edad que teníamos ya nos valía.
En los pisos de estudiantes era muy típico ir recogiendo cosas de la calle con una posible utilidad,aunque fuera meramente decorativa,y si esos objetos que se recogían se hacía a la hora de recogida de las salidas nocturnas entonces valía de todo,todo cobraba un valor especial.Y aquí empieza mi primera historia que les quería contar,la de la megafonía.
Una noche de esas cayó en nuestras manos un pivote de esos naranjas,que se utilizan para las señalizaciones de obras en las calzadas y poco a poco aprendimos a darle uso,en un principio,nos pegábamos sustos entre nosotros mismos ,nos esperábamos por ejemplo a que saliera la victima del cuarto de baño y justo salir le dábamos un grito con el pivote que tenía un efecto megáfono que os podéis imaginar,el que se asustaba se cagaba en tus muertos y todos tan contentos.Pero la cosa no quedó ahí en pequeños sustos entre los compañeros,había que ir mas allá en esas tardes de mayo,que menos estudiar imaginábamos de todo,o por lo menos nos aliviaba de tensiones en los pequeños descansos antes de cenar,entre cafés.Entonces fue como surgió la primera gran actuación de nuestro megáfono.En San Antolín (Murcia) por el mes de mayo y con la caída del sol se hace una mini procesión donde se pasea a la virgen por el barrio para luego recogerla en algún portón de algún edificio donde se le hacía una ofrenda y cada uno o dos días en un edificio distinto,cuando la paseaban por nuestra calle iban cantándole una canción que siempre era la misma,y lo hacía una voz muy peculiar ayudada con un megáfono pequeño,entonces al oír la canción la gente salía a los balcones y a veces hasta le aplaudían,y ya se quedaban mirando...pues una tarde sin mediar palabra, Juan,un compañero calculando que faltaba poco para que pasara la procesión,abrió la puerta del balcón y detrás de las cortinas y megáfono en mano se puso a cantar la canción de manera inequívoca:..."entre todas las mujeres,entre todas las mujeres y bendito sea el fruto de tu vientre Je...."y claro empezó a salir la gente a los balcones para ver pasar a la virgen que no estaba pasando,nosotros también nos asomamos y pusimos cara de circunstancias,al igual que todo el vecindario,la gente como es normal se preguntaba dónde coño estaba la procesión,así que quedó en misterio y la gente se empezó a meter en sus casas,y claro mas vale dos veces que una.
Cuando se metió el último gato,vuelta a empezar:"entre todas las mujeres...." y otra vez el mismo rollo,la gente que salía de nuevo cagándose ya en los misterios,entre ellos nosotros también.Ni que decir tiene,cuando nos metíamos de nuevo al salón el descojone que nos pegábamos.Otros usos que le dimos a nuestro querido megáfono fue cuando una tarde no paramos de llamar a un agente municipal,que estaba desviando el tráfico,porque había un concierto de campanas,y cada veinte minutos lo llamábamos :"agente" o "agente Jaime" el pobre no sabía ya para dónde mirar.Otra fue cuando en un piso de enfrente que también era de estudiantes,y con los calores se dispuso a quedarse uno de ellos en calzoncillos y se le preguntó con la megafonía:"¿que hace ese individuo en calzoncillos?" que susto se llevó el pobre,que tuvo que cerrar la ventana y todo,sin saber de dónde coño venían las voces.
La otra travesura que quería contarles es la de unas proyecciones esporádicas que hicimos desde la ventana de la galería a una pared blanca que quedaba en frente y que quedaba a la vista de bastantes viandantes.


Eramos casi todos aficionados al super-ocho,teníamos cámaras de grabación y un proyector.También teníamos una cinta de tres minutos pornográfica,que salió del anterior piso de un compañero,la cinta era de lo mas cutre,que se pueda uno imaginar,pues en una noche de esas cualquiera de aburrimiento veíamos como salían unos obreros de la obra cuando empezamos a proyectar la cinta,un compañero silbó y este grupo de obreros no daban crédito a lo que estaban viendo,primero saltó uno y dijo:"coño si han puesto cine" a lo que saltó otro:" pero si están follando"y se armó una revolución de la hostia por lo que recogimos el tinglado rápidamente,al día siguiente más de lo mismo,y estos alucinados,al tercer día ya estaban esperando la peli y al no ponérsela,se pudieron oir las quejas de uno de ellos:"esto no es serio ehhhhh?con esto no se juega"...en fin tuvimos que dejar de hacer esas proyecciones clandestinas porque cada vez había más público... y mas exigente.