dijo la cabra:

saber mirar es como hacer fotos sin cámara,"mírame"

jueves, 6 de noviembre de 2014

Los peces barba y los peces piedra

Creía que en la sombra de aquella cala dormiría placidamente, pero al cabo de dos horas sus propios sentimientos de paz no le dejaban descansar. Le arrebataban ideas sobresaltantes su paz.
Salió de la sombra que le proporcionaba un saliente de roca y caminó hacia la orilla. Una vez allí mojó sus pies y empezó a buscar piedras planas. Cogió como media docena ( en esa cala no era dificil encontrarlas) y empezó a lanzarlas a la mar con tal estilo que las hacía rebotar como unas veinte veces antes de hundirse al fondo.
Mientras las lanzaba pensaba en muchas cosas, era como una distracción que le devolvió la paz. Pero de nuevo le llamó la atención los sobresaltos que daban las piedras elegidas por él.
El mar tenía ese verde, ese verde mar que se ve tras las lluvias de otoño. El sonido de las olas arrastrando la arena de un lado para otro le recordaba a su corazón, hecho de soplidos de cielo azul con verde mar.
Marinero de sus piedras lanzadas que por instantes rebotaban en un verde mar, buzo en su corazón intentando salvarlas.
Adrede suspiró, apretó el puño con un montón de arena. Suspiró de nuevo y se bañó.
Mientras se bañaba buceó, abría los ojos y veía un fondo de arena blanca...entonces vio un "pez piedra" y un "pez barba".
Los peces barba eran los que su abuelo mencionaba cuando era pequeño para demostrarle que no tenía que tenerle miedo a la mar, contándole que eran peces que le hacían cosquillas con sus barbas dándole la bienvenida al baño.Sobre los peces piedra le contó que eran peces que simbolizaban las cosas que habías amado y amabas en el recuerdo y que a veces se hacían pasar por piedras posándose en la orilla para que los lanzaras y volvieran a revivir de alguna manera y que por eso la gente lanzaba piedras sin saberlo.
Vió un pez piedra que no lo había lanzado el, y era un pez piedra de un verde mar y un...que le atrajo muchísimo,se sumergió y lo rescató. Era una piedra preciosa que ahora guarda en la pecera de su corazón.
Al salir del verde mar con el pez piedra en la mano un pez barba le acarició la barriga que le produjo ese entrañable cosquilleo del amor.
 

4 comentarios:

  1. ¡¡¡¡Precioso!!!!!Solo estos bellos relatos nacen de personas enamoradas¡¡¡
    ¿De qué?, de todo; de la vida, de las personas, ..a pesar de las dificultades.

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    1. bueno...aunque parece que he sido yo el que se ha contestado se que has sido tu Encarni desde el mismo ordenador...es ud una de esas personas que menciona!!!

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  2. Encantador!! Es un relato que te acaricia y te envuelve con su olor a mar y si estas atenta, hasta puedes sentir los latidos de ese corazon henchido de amor.

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